
Cuando estoy muy cansada, suelen verse en mí, dos reacciones a saber:
1) Me pongo más intolerante de lo habitual.
2) Respondo gansadas que caen de mi boca sin pensarlas.
Van aquí dos ejemplos que me pasaron ayer.
Cliente (que siempre viene a última hora 5 minutos antes del cierre, sí, a tal extremo)
Cliente: -Claaaaaah, porque lo que yo quisiera hacer es que mi padre me "done en vida"
La Pé: (mirando la hora, como todas las veces y queriendo que no se note la transformación facial) -Si, claro, se dona mientras se está vivo, después se hace imposible.
Cliente: -Claro, eso le decía yo a Marta (ponele) que quiere hacer lo mismo con la madre, porque después se le va a complicar, no?
La Pé: (harta) Por supuesto, ya es más complicado disponer de nuestros bienes una vez que nos morimos.
(Me parece que no lo entendió, igual)
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Jefa: -Mirá, se olvidaron un estuche de anteojos. Me parece que se los olvidó hdfjkghkd
La Pé: - No creo que sean de fjkdgjkl, porque vió que siempre "usa lentes puestos". (La palabra era PERMANENTES)
Entendés Roberto por qué necesito vacaciones???